El ministro Bahl explicó que “cuando son retenidas, cada moto es llevada a un galpón, donde se le coloca un código de barras y se le toma una fotografía. Esto queda asentado en un acta y todos estos datos son reunidos en software exclusivo que los archiva en una base de datos para darle seguridad y garantía a los propietarios de que los vehículos secuestrados son cuidados y resguardados”. 

“El procedimiento nos permite mostrar la condición en que se encuentra el vehículo al momento de ser retenido y cargar todos los datos al software para que al momento de retirar las motos el trámite sea más simple”, señaló  Bahl, al tiempo que reflexionó diciendo que “hace 20 días que estamos haciendo estos controles y están a la vista de todos los resultados obtenidos. Esto demuestra que cuando tomamos la decisión no estábamos equivocados“. 

Finalmente, el ministro Bahl agregó que  “cuando anunciamos que el 12 de septiembre empezábamos con los controles, hubo muchos que pensaron que no lo íbamos a hacer y sin embargo, hemos cumplido nuestra palabra y la vamos a sostener, porque esta es una medida que llegó para quedarse. Porque de lo que se trata es de solucionar definitivamente un problema de seguridad y de tránsito que tenía muy preocupados a los vecinos". 
 

El procedimiento 

Cada moto vehículo retenido es llevado a un galpón acondicionado especialmente, donde se cumple un riguroso procedimiento. En primera instancia, se identifica el móvil con un código de barras y se lo fotografía para luego elaborar un acta dando precisiones del estado en que se encuentra al momento de ser retenido. 

Todos los datos con reunidos en un software exclusivo y archivados en una base de datos que brindan seguridad y garantías de que los moto vehículos retenidos se encuentran resguardados y en las mismas condiciones que al momento de su retención.