Tras un año y casi cuatro meses sigue sin haber novedades de cómo ocurrió la muerte del docente, ya que no se han encontrado con testigos directos del hecho que son fundamentales para avanzar en la investigación.

A finales de noviembre de 2013 el fiscal Vila reconocía estar haciendo una serie de pruebas periciales encargados a la División Criminalística dependiente de la Jefatura de Policía.

A marzo de 2015 la causa presenta nulos avances y se espera la recepción de un informe de ADN encargado a la Oficina de Genética del Superior Tribunal de Justicia. A ello se suma el rastreo de las líneas telefónicas encargados a la empresa Telecom.

En el expediente que detalla la muerte de Benítez no hay nadie imputado por el homicidio. En su momento Vila describió a la prensa que la hipótesis que manejaba sobre el crimen era de que sea un hecho “pasional y no de robo” ya que el cuerpo tenía encima la billetera y celular, agregando que necesitaba tener más pericias. Los elementos secuestrados en la vivienda y en el allanamiento de una casa en calle Yuquerí al 1400 días después fueron enviados también a Paraná.

Pablo Benítez, de 38 años, falleció de varios puntazos de cuchillo uno de los cuales, casi a la altura de la garganta, lo degüella. El hecho se conoció pasadas las 9 de la mañana del martes 19 de noviembre de 2013, a través de un llamado al Comando Radioeléctrico de Concordia, el que se alertaba sobre el hallazgo de una persona sin vida en un domicilio en las inmediaciones de calles Lamadrid y Tucumán. En el lugar intervino personal de la comisaría Tercera y la División Criminalística.

A través de una gacetilla enviada desde la Jefatura de Policía de Concordia se informaba por ese entonces que personal de esta Jefatura se encontraba colaborando con la realización del allanamiento y puntualizaba “que el móvil del supuesto delito sería un crimen pasional (SIC), el fallecido habría tenido una relación con una señora casada y fue sorprendido por el esposo de la mencionada”, se indicó.

De acuerdo a lo que se precisó por esos días a Diario Río Uruguay, el cuerpo de Benítez fue encontrado por su padre y un hermano, quienes lo habían visto con vida por última vez el domingo anterior, cuando se reunieron para mirar por televisión el partido que Boca Juniors perdió frente a Arsenal. Según relataron sus familiares fue en ese momento cuando recibió un llamado a su teléfono celular que lo hizo salir rápidamente hacia su domicilio, y desde entonces –siempre de acuerdo a este relato– no tuvieron contacto con el fallecido.

Preciso es de recordar la convocatoria a una marcha en silencio que hicieron los familiares y amigos de Benítez, con destino a la sede de los tribunales de Concordia exigiendo tener avances en la causa por el homicidio.