Las versiones sobre el accidente eran disimiles, ya que desde la Comisaría 5 con jurisdicción en el lugar se mencionaba que el vehículo se habría descontrolado por el reventón de un neumático, pero si embargo el propio conductor habría señalado a los agentes de la Dirección de Tránsito que perdió el control del rodado por esquivar un perro.
Lo concreto es que el auto iba a una velocidad importante, ya que una vez que hizo el trompo la inercia le alcanzó para cruzarse de carril y (de cola) golpear contra el tapial de la vivienda, volteando en su carrera el pilar con el medidor de la energía eléctrica, por lo que en el lugar del accidente debió solicitarse la presencia de personal de la Cooperativa Eléctrica.
El Renault Megane 2 (de color gris y dominio GXQ 040) era conducido por un hombre de 32 años identificado como Claudio Ramón Martin, quien afortunadamente no padeció lesiones de ningún tipo, como así tampoco los habitantes de la vivienda afectada.