El desesperante hecho ocurrió cuando el niño se tomó de la columna de una de las farolas, ubicada al lado de un tensor de acero que sostiene uno de los postes de madera, perteneciente a una empresa de comunicaciones. El niño asustado y dolorido por el tremendo shock eléctrico, lloraba desconsoladamente, ante lo cual sus familiares fotografiaron el sitio donde ocurrió la descarga, para advertir del peligro.
El niño fue trasladado por su familia al Hospital Santa Rosa, donde quedará en observación hasta este viernes, pero se confirmó que presentaba quemaduras en ambas manos.
Personal de la compañía eléctrica, se apersonó al lugar y luego de confirmar en una de las luminarias públicas, la presencia de tensión, eliminó el peligro existente cortando la provisión de energía eléctrica a toda la línea de farolas y preventivamente, se pusieron fajas de seguridad.