Ante lo sucedido, la mujer desciende del rodado para reclamarle al trabajador del volante los daños provocados y este lejos de mediar un conversación coherente, la habría agredido en un principio verbalmente y luego físicamente, propinándole un fuerte golpe en su rostro, según testimonios recogidos por las cámaras de Central de Noticias.
La conductora, que se encuentra cursando el quinto mes de embarazo fue socorrida de inmediato por vecinos y transeúntes ocasionales, ya que nadie podía ni entender ni justificar la supuesta violenta reacción del remisero.
La mujer argumenta que estaba bien estacionada, mientras que el remisero aduce que no solo ella estaba estacionada en un lugar exclusivo para remises, sino que la señora fue quien lo golpeó en primera instancia; versión que no se condice con las declaraciones de los testigos.
Intervino en el hecho, personal de la policía Motorizada y del Comando Radioeléctrico.
