Al solicitar la documentación de la moto y ver que los ocupantes no contaban con la misma, los agentes policiales realizaron un control de número de chasis y motor, tras constatar que el rodado no contaba con una patente colocada.
En ese momento, habrían observado que ambos números presentaban signos de haber sido adulterados, por lo que se comisionó al verificador policial en turno para realizar las pericias pertinentes.
De esta manera, el rodado fue secuestrado y fue puesto a disposición de la Fiscalía interviniente.