Todo comenzó con un llamado al 101 informando de un incendio que efectivamente ocurrió. Se incendió casi en su totalidad y se trataba de “una casilla de madera, de construcción precaria, dividida en tres habitaciones utilizadas como dormitorio, habitada por una ciudadana mayor de edad y una pareja”.
Según explicaron los damnificados, el incendio se produjo por una vela que era utilizada para iluminar el lugar, que se encontraba sobre un tacho “y supone que la misma cayó sobre el colchón de una cama, iniciando de esta manera el foco ígneo”.
Afortunadamente, se registraron solo daños materiales. En el lugar trabajó personal de Bomberos Voluntarios de Chajarí, se labraron las diligencias de rigor y se puso en conocimiento del hecho a la Unidad Fiscal Jurisdiccional.