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Gustavo Bordet, diputado nacional por Entre Ríos
El actual legislador nacional se refirió a la serie de charlas de las que viene participando en distintos lugares de la provincia, como el que se vivió el pasado viernes en el Centro de Empleados de Comercio de Concordia. Consultado al respecto, dijo que todo ese movimiento “tiene que ver con un reacomodamiento después del proceso electoral que tuvimos el año pasado”, señalando que “primero se planteó una autocrítica a partir de la renovación de las autoridades partidarias (nacionales), que fue un largo proceso, pero que culminó con mucho éxito”.

En diálogo con Diario Río Uruguay, explicó que “terminada esa etapa, comienza otra, para poder ir reperfilando nuestro movimiento, nuestro partido, para los tiempos que vienen”. En ese camino, resaltó la importancia de “ir escuchándonos y formar una masa crítica a partir de distintas exposiciones de personas”, con el objetivo de, luego de eso, “proponer a la sociedad entrerriana una alternativa electoral”, con la cual “ser plenamente competitivos”.

Aclaró que en este tipo de encuentros “no todos pensamos igual, pero nos une un común denominador, que es generar una renovación dirigencial” y “propuestas políticas, en todo el territorio de la provincia, a la altura de las demandas que hoy la sociedad tiene y que todavía continúan insatisfechas”.
Fotografía con CFK
Consultado sobre si en esa búsqueda se inscribía la foto con la ex vicepresidenta Cristina Fernández y sobre la sorpresa que había generado ese encuentro, Gustavo Bordet dijo que “los que se vieron sorprendidos fueron nuestros opositores”, afirmando que “operaron la foto a través de un mecanismo de comunicación del gobierno de la provincia de Entre Ríos, que realmente me sorprendió”.

Específicamente sobre la foto y la reunión de la que también participó Guillermo Michel, el ex gobernador naturalizó que “se da en el marco de un proceso de elecciones internas que se llevaron adelante dentro del partido justicialista para normalizarlo”, ya que “todos queríamos lograr una lista de consenso”, admitiendo que “nosotros considerábamos que la expresidenta podía generar el consenso necesario para conducir el justicialismo y fue en ese marco que dimos el apoyo”. Incluso contó que “a mí me habían propuesto ser integrante del Consejo Nacional del Justicialismo, pero decliné esa oferta porque entendía que hay que renovar las autoridades partidarias y ya había formado parte durante 8 años”. Fue por eso que se dio prioridad a “quienes hoy tienen representatividad territorial, por eso es que se propuso a los intendentes, que son Adrián Fuertes, Isa Castagnino y Gustavo Bastián”.

Bordet agregó que “nuestro movimiento (justicialista) es amplio y hay gente que no piensa igual”, pero insistió que “una foto no debe sorprender a nadie, ni debe generar absolutamente ninguna suspicacia de nada”, salvo “consolidar y fortalecer un espacio político”.

Con respecto a la diversidad de opinión, ejemplificó que “en nuestro bloque de la cámara de diputados (nacionales) somos 99 legisladores y nos mantuvimos todo el año votando en bloque”, a pesar que “eso no quiere decir que los 99 pensamos igual”, pero se prioriza “aglutinar a todos los componentes para tener una propuesta consolidada y, en ese marco, esa es la explicación de la reunión y la foto (con CFK), donde intercambiamos opinión durante una hora y media, y que no debe sorprender a nadie”.
Convicciones y prioridades de algunos peronistas
En la charla surgió el caso de dirigentes peronistas que, en este tiempo, se sumaron a la gestión provincial de Rogelio Frigerio. Al respecto, Bordet dijo que “esto ocurre siempre”, porque “hay personas que tienen más convicciones, otras que tienen menos y otras que no tienen ningún tipo de convicciones”. En su caso, recordó que “yo me afilié al justicialismo en 1983 y siempre me mantuve en esa línea”, independientemente de los resultados, “porque me ha tocado ganar y perder elecciones”.

En ese marco, dijo que “lamentablemente, por ahí hay dirigentes que priorizan otras cuestiones, que a veces van a lo estrictamente económico, olvidando principios y postulados”.
El ex gobernador aseguró que “esto no pasa solo en el justicialismo, pasa en muchos partidos”, donde algunos dirigentes “de acuerdo a cómo van cambiando las expectativas electorales, van cambiando sus preferencias, sus opiniones y traicionando sus principios e ideas”, pero rescatando que al menos “sirve para saber quién es quién y donde estamos parados”.
A un año de entregar el gobierno provincial
El próximo 11 de diciembre se cumplirá el primer aniversario de la gestión de Rogelio Frigerio, quien recibió el mando del propio Gustavo Bordet. Al respecto, el concordiense apuntó que “entregamos una provincia en perfecto orden, donde todo funcionaba, con un equilibrio fiscal de varios años consecutivos, donde cerrábamos nuestros ejercicios fiscales no solo en equilibrio, sino que con algunos excedentes”. A eso sumó que “había obra pública en marcha y con respaldo presupuestario”, y que en materia de sueldos “los salarios de los docentes y de la administración pública le ganaban a la inflación”.
Sobre el presente, dijo que está marcado por “cuestiones que venían de impacto de la economía nacional de nuestra gestión”, remarcando que “lo digo a modo de autocrítica”. Pero el cuadro se agravó, porque “también hubo un recorte brutal de las transferencias del estado nacional a las provincias argentinas, que no son discrecionales como se dice por ahí, sino que son transferencias directas que tienen su fundamento en una Ley, como por ejemplo la compensación de los fondos en las cajas de jubilaciones o los fondos que se transfieren por regalías y excedentes de Salto Grande y los fondos incentivos docentes”.

Reconoció que “esto, obviamente, produjo un recorte muy abrupto y fuerte en las provincias argentinas y Entre Ríos no fue la excepción”. Un combo que “generó parálisis de obra pública, una discusión salarial muy intensa por el deterioro” de los mismos “y también la pérdida de más de 3.500 puestos de trabajo de la actividad privada en Entre Ríos”.

A eso agregó “más cosas que hoy están afectando gravemente a la institucionalidad de la Argentina, como el destrato a los gobernadores, junto a la irritación continua y constante de la sociedad, que no contribuyen a una moderación política, que lo que una sociedad en definitiva busca”.
Bordet afirmó que “todo esto no solo nos preocupa, sino que tenemos que evitar quedarnos solo en el diagnóstico y avanzar con propuestas”.
Candidaturas 2025
Ante el interrogante de que va a pasar en el PJ entrerriano de cara a las elecciones intermedias del próximo año, el actual diputado nacional aseguró que “hoy no hay un escenario electoral que esté claro. Lo único cierto que hay es el cronograma electoral, que empieza a tener vigencia a partir de marzo” y que “por primera vez se va a votar con boleta única de papel, dato que no es menor y no debe pasar desapercibido”.

A su vez, por otro lado, “se ven mensajes contradictorios, porque el gobierno nacional acaba de enviar -a la Cámara de Diputados- un proyecto para eliminar las PASO y todo esto genera un clima de incertidumbre, a pesar del cronograma electoral”. Para Bordet, “el gobierno (nacional) está tratando de abonar la confusión y poder ganar el tiempo que necesita y que tiene”, ya que posee la potestad “en cuanto a las reglas de cómo se va a competir electoralmente”.