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En principio, consultado sobre el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional y el anuncio de un entendimiento por parte del gobierno, Cresto anticipó que “va a primar el sentido común, porque en este acuerdo con el FMI estamos tratando de reparar un daño enorme que se ha hecho al país por una deuda que la Argentina no necesitaba”.

“El peronismo tiene una característica, cuando empieza a gobernar mira para adelante y trabaja para reconstruir todo lo que destruyó el gobierno anterior, como pasó en varios momentos de la historia y como está pasando ahora. Pero tiene que haber una parte del Gobierno que se dedique también a mirar un poco qué es lo que pasó con esta deuda, porque se lo debemos a todos los argentinos”, argumentó.

“Es una responsabilidad del Gobierno para con la ciudadanía investigar cómo se gestó esta deuda y las consecuencias derivadas de esta irresponsabilidad que perjudicó a millones de argentinos, porque acá lo que se hizo fue un acuerdo entre referentes del FMI y del espacio que gobernaba con un solo fin: la reelección del gobierno anterior. Fue como un gran aporte de campaña donde se usó al Estado Nacional como garante”, remarcó el funcionario nacional.

“No cumplieron su objetivo electoral, se fugaron los recursos y dejaron al país con una carga muy pesada. El Estado quedó entrampado en una deuda que no benefició a los argentinos en producción, trabajo, infraestructura, ni nada; sino que se fugó para beneficiar a un grupo de familias y amigos del Presidente. Esa es la realidad que tenemos la obligación de dar a conocer”, agregó Cresto.
Intolerancia
Sobre la reacción del bloque opositor en el Congreso durante el discurso de Alberto Fernández, cuando varios legisladores macristas se retiraron de la sesión, dijo que “esta actitud, que no es democrática ni de respeto a las instituciones, la asumen personas que no tienen la responsabilidad política de lo que costó esta democracia en la Argentina. Son actitudes de intolerancia”, dijo.

“La grieta se sigue manteniendo en la Argentina, pero cada vez con sectores más minoritarios. Eso es lo más importante y es lo que hay que resaltar. La mayoría de los argentinos representados en el Congreso no tiene esa opinión ni avala esa particularidad de levantarse en una Asamblea Legislativa que es donde el Presidente hace la apertura de las sesiones ordinarias y hace un resumen de todo lo que se hizo y está proyectado hacer”, añadió.

“En mi primera gestión como intendente gobernamos durante cuatro años generando consensos. Las ordenanzas en más de un 95 % fueron aprobadas por unanimidad y con representantes de todos los sectores políticos; pero al momento de trabajar en pos de un proyecto de una ciudad mejor, todos tenemos el mismo objetivo. Y le dábamos para adelante, para que a Concordia le vaya bien”, ejemplificó.
Obra pública y reactivación económica
A propósito del trabajo que lleva adelante ENOHSA, Cresto señaló que en Argentina 8 millones de personas no tienen agua y 15 millones no tienen cloacas y “esa es la brecha que estamos acortando, con obras que llevan soluciones, amplían derechos y le cambian la vida a la gente”.

“En Concordia, por ejemplo, se hizo un proyecto integral con el objetivo de llegar al 100% de agua y cloacas. Teníamos 83 % en agua y 64 % en cloacas y vamos a estar llegando entre este año y el próximo al 100 % de cobertura. Estas son obras que es imposible que las haga un municipio solamente con fondos propios o con fondos provinciales si no está la ayuda o la decisión del Gobierno Nacional de hacerlo. Cuando nos tocó asumir la única ciudad argentina con 100% de agua y cloacas era la Capital Federal y la decisión de federalizar los recursos y este organismo viene de parte de nuestro Presidente Alberto Fernández apunta a disminuir esas asimetrías.

“El impacto de la obra pública es directo además en la generación de empleo. En Concordia hay mil puestos de trabajo genuino sólo generados por la obra pública con el Aeropuerto, la Planta Potabilizadora, el Relleno Sanitario del Campo del Abasto, las obras en Ruta 4 y el camino a Osvaldo Magnasco y todos los frentes de obras que están en marcha en la ciudad”, subrayó.
Un presidente empoderado
Retomando las referencias al mensaje presidencial en la apertura de sesiones, Cresto insistió en que “fue un discurso esperanzador, haciendo una reseña de lo que fueron estos dos años en la Argentina de la pandemia que además vinieron después de cuatro años de macrismo. Por supuesto que ahora viene otra etapa de la Argentina que necesita a todos unidos y un Presidente empoderado que tiene que llevar adelante la transformación de la Argentina, en un país que se está recuperando. Después de prácticamente cinco años y medio de pérdida del poder adquisitivo empezó una etapa de recuperación del salario y de la economía en un contexto mundial difícil, pero siempre con el objetivo muy en claro de la reconstrucción de un país que tiene mucho para dar”, expresó.

“Hay un proceso de reconstrucción en marcha, con un sentido federal que marca la diferencia. En un país centralista como es la Argentina, es muy importante que haya una impronta federal del Presidente, de la Vicepresidenta, del Congreso que son los órganos que habilitan, votan el presupuesto y discuten la distribución de los fondos. Esa es la Argentina que viene; una de crecimiento como se ve en todos los índices: en la construcción, el empleo, el poder adquisitivo, y es lo que vemos para adelante”, concluyó.