Sin sorpresas
Kueider comenzó recordando que “desde el momento en el que (el proyecto de) la Ley de Bases entró a la Cámara de Senadores, creía que había que darle tratamiento”, argumentando que se debía asumir “una actitud mucho más responsable como legisladores”, con el objeto de “recuperar diálogo democrático”, ya que el mismo “se ha ido perdiendo durante estos últimos años”.El legislador de Entre Ríos insistió en que “es una visión que yo he manifestado en algunos medios previamente, por una cuestión de convicción, porque así considero que debe ser la política”.
En ese tramo dijo que prefería tomar distancia de quienes señalan que “si le va mal al que gobierna mejor para nosotros, porque lo único que hacemos es tirar para abajo”. Como ejemplo, dijo que “cuando algunos sectores, como el bloque Unión por la Patria, planteaba el plan A de voltear la ley y el plan B de discutir los artículos”, su posición siempre fue la de “ir por el plan B, ver si podemos acordar modificaciones, si podemos mejorar la ley y después, si no podemos mejorarla y la ley es mala, ahí si vamos a voltearla”.
Reconoció que “muchos sectores del peronismo no lo han interpretado a esto y han comprado la consigna de que hay que voltear todo”, pero apuntó que muchos de sus críticos “ni siquiera han leído las leyes, no han leído lo que se ha votado, ni saben que hemos modificado”.
Dijo que “esto en el Justicialismo no lo entienden y me han inundado con críticas y demás, pero la verdad mi postura es firme, la vengo manifestando hace tiempo y no es sorpresa”, recordando que “así se lo he manifestado al presidente del PJ (de Entre Ríos) y se lo he manifestado a toda la dirigencia del senado de la nación”, por lo que “a nadie le sorprendió la postura”.
Un Milei “volátil”
Ante la consulta si espera una reciprocidad por parte del presidente Javier Milei al planteo de “recuperar diálogo democrático”, el senador Egardo Kueider dijo desconocer “qué va a hacer el presidente, porque es muy volátil con sus consideraciones”, por lo tanto, “que haga lo que quiera, pero espero que haga las cosas mejor de lo que las está haciendo”.Aunque puso una cuota de esperanza en que tenga “la apertura, la voluntad y la visión de cambiar su actitud”, para así “recuperar la política de sentarse a discutir las cosas”. Incluso rescató que algo de aceptación fueron todas las modificaciones a la Ley Bases, “a lo mejor por necesidad, pero lo hubo”. Aunque, “si después continúa una actitud beligerante, ofensiva como la que va teniendo, seguramente va en contra de esto, pero lo que no se puede permitir es que a nosotros hagamos lo mismo”.
Consultado sobre la convocatoria que el propio Milei dijo que haría a todos los senadores que votaron a favor de la norma, Kueider respondió que “si es para llenar una foto no me interesa”, pero que “si vamos a hablar de un acuerdo importante para el país y vamos a tener una instancia donde podamos trabajar y se puedan aceptar las críticas, las propuestas para mejorar muchas de las medidas que por ahí lleva adelante el gobierno, bárbaro, pero sino no”. Inmediatamente aclaró: “Yo no apoyo las medidas del gobierno de Milei, para nada estoy a favor de sus medidas, no va con mi forma de pensar”.
Un gobierno nacional sin excusas
Kueider interpreta que, con la aprobación en el Senado “le estamos dando al presidente su Ley y con esto, le estamos quitando también la excusa de que, si le va mal, no va a ser por el peronismo”, sino que “será por sus propios méritos, por sus propios defectos y no porque nosotros le rechazamos una ley”.Fue allí donde aseguró que Milei “no tiene la ley que en principio quería” con aquel primer proyecto “que mandó por enero”. Dijo que aquella primera iniciativa “no tiene punto de comparación con esta. Hemos sacado una ley que tiene muchos puntos que han sido mejorados”.
Enumerando que “excluimos todo lo vinculado a la disolución de organismos vinculados a la ciencia, a la tecnología, a la cultura”, como el INTA, el INTI y el INCAA. Por otro lado, “he votado en contra del RIGI (Régimen Industrial de Grande Inversiones), que también era otro punto controvertido que había en la ley”, como así también, “eliminamos por completo el capítulo de la reforma previsional”.
Por eso, de aquel proyecto “personalmente logré que se sacara la privatización de Aerolíneas, la desfinanciación de la Cultura o el cierre de organismos de la ciencia y de la técnica”. Como así también, en conjunto, se pudo salvar “a los medios públicos (de comunicación), se pudo sacar la Reforma Jubilatoria”. Por todo ello, a la norma “que recibimos, nosotros logramos modificarla y hacer una ley mejor”, aseveró.
Futuro en el PJ
“No sé qué camino seguirá el PJ conmigo”, señaló, “porque han pasado pedidos de desafiliación y un montón de otras cosas”, las cuales “tendrá que resolverlas el partido”. Pero advirtió que, a la hora de las acusaciones, “tendrán que decirme donde yo vulneré alguna directiva partidaria, porque no tuve ninguna”. Deslizando en ese marco, que hoy por hoy, “el partido está en una situación importante de inconducción a nivel provincial, al igual que a nivel nacional”.Kueider apuntó que “mucha gente no sabe lo que dice la Ley Bases, me he dado cuenta porque cuando he recibido críticas”, a las que pidió mayor grado de detalles y como respuesta “hubo consignas más de índole político partidario” y sobre aquellos puntos más cuestionados “están todos eliminados de la ley” o como en el caso del RIGI “no pueden achacar que lo voté. Entonces, ¿de qué me están acusando, de votarle la cáscara que quedó?” de aquel proyecto original.
Violencia fuera del congreso
Antes la consulta sobre lo que le generaron los hechos vividos fuera del Congreso, dijo que rechazaba “todo tipo de violencia, ya sea en una manifestación pacífica por parte de las autoridades, como también si hay un exceso de los manifestantes”. Por eso, “rechazo lo que pasó, a tal punto que tuvimos que conformar una comisión para salir a hablar con las autoridades de las fuerzas para que cesen el nivel de represión que se estaba dando”.También se le preguntó si compartía la denuncia presidencial sobre un supuesto intento de golpe de Estado por parte de los manifestantes, a lo que calificó como “una exageración”, ya que “fueron organizaciones a manifestarse en contra de la votación de una ley que consideraban que no había que votarla. Fue una manifestación como hay normalmente en esta zona. No tiene nada que ver con un Golpe de Estado”, concluyó Kueider.