Lapiduz afirmó que su propuesta tuvo “un crecimiento exponencial en 45 días”, entre otros aspectos, porque “no cargamos con la mochila de tener dentro a los mismos de siempre, al contrario, somos un frente que no viene a cambiar figuritas, sino a transformar la realidad de Concordia”.
El precandidato remarcó que “estamos caminando a diario para llegar a escuchar las necesidades de los vecinos en los 109 barrios de Concordia”, acción que se lleva adelante “mientras algunos estaban declinando candidaturas y negociando cargos”.
Respecto a la polémica por la imposibilidad de pegado que perjudica a la postulación de Galimberti, Lapiduz evaluó que “imposibilitar que todos compitamos en las mismas condiciones atenta contra la democracia”. Fue allí cuando desafió que “si tan seguros estaban de ganar los amigos, calculo que no tendrán problemas de que nos subamos todos al mismo ring”, pero que más allá de eso “nosotros estaremos como opción en el cuarto oscuro del modo que sea”.