Según se informó, el grupo decidió hacerle sentir al único detenido su repudio. "Nosotros nos convocamos para hacer marchas en distintos puntos de la ciudad, estuvimos en Tribunales y vinimos a la Unidad Penal porque queremos que él escuche que la gente está enojada y que sabemos que fue el último en ver a Luisina", afirmaron los manifestantes.
En ese sentido, agregaron, "queremos que sepa que Luisina no está sola".
Corte
Además de prender fuego cubiertas, los concurrentes cortaron el tránsito vehicular sobre calle Alem. En efecto, el grupo decidió hacerse escuchar con cantos y tambores. "Luisina no está sola" resonaba, además, coreaban "asesino"; canto que tuvo réplica dentro de la Unidad Penal por parte de internos que se sumaron a lo que pasaba afuera.
"Estamos cansadas de tener que lamentar víctimas. No sabemos qué hubiera pasado si el caso no se hacía conocido y no estábamos todos pidiendo por Luisina", aseguraron los presentes.