Al respecto, indicó que “fue un aumento del 15%”, por lo que “estamos hablando de un aumento de 1000 pesos promedio en la garrafa de 10 kilos, que es la más vendida”.
De esta manera, mencionó que “retirada en planta, una garrafa de 10 kilos la vas a conseguir, en promedio, entre 7.000 y 8.000 pesos, mientras que a domicilio podría variar a criterio del distribuidor, pero alrededor de unos 10.000 pesos”. Por otro lado, aclaró que el aumento también se reflejó “en el caso de los tubos”, por lo que “estamos hablando en un promedio de 41.000 y 45.000 pesos a domicilio”.