Durante el lunes la situación estuvo relativamente contenida, con una importante cantidad de efectivos de la Policía de Entre Ríos, de las comisarías Séptima y Octava, quienes durante toda la jornada mantuvieron a límite al numeroso grupo de personas que pretendía ingresar al predio, donde están previstas un total de 250 viviendas, construidas con fondos del gobierno nacional.
La guardia policial se mantuvo durante todo el lunes, a la espera de una medida que defina los pasos a seguir, pero los tiempos se dilataron y la empresa constructora que lleva adelante los trabajos resolvió retirar del lugar los materiales y herramientas de trabajo, ya que en los tumultos se habían sustraído parte de estos objetos.
Tras ello, las viviendas y los predios donde se construyen las demás comenzaron a ser ocupadas por las familias que se había agolpado en los alrededores. De acuerdo a lo que se notificó a este medio, las obras ya contaban con 10 terminadas, 42 viviendas con importantes grados de avance y otras 106 con plataforma consolidada.
En la mañana de este miércoles, luego de una noche que pasó con la ocupación del lugar, se hicieron presente funcionarios municipales, quienes acompañados por efectivos de la Policía de Entre Ríos explicaron a los usurpadores que esas viviendas están destinadas al Plan de Relocalización de familias bajo cota 14, incluidas en el registro oportunamente confeccionado.
Con el agravante que, tal como establece una ordenanza vigente, aquellas personas que usurpen viviendas o terrenos quedarán automáticamente vedadas que poder ingresar a cualquier registro de aspirantes a viviendas sociales.
