Ante estas advertencias, “temprano se concurrió al lugar con personasl de Inspección General”, para verificar que “efectivamente había una competencia que se estaba por desarrollar, con mucha gente presente”. Barboza señaló que “este tipo de prácticas deportivas únicamente están habilitadas para entrenamiento, con todo el protocolo que corresponde, pero nunca para competencia.”
El Secretario de Gestión culminó señalando que se labró el acta correspondiente, se notificó a los organizadores y el lugar se clausuró por ser el sitio que se iba a usar como lugar de la prueba deportiva.
Vale remarcar que con Diario Río Uruguay se contactaron algunas de las personas que estaban presentes en el autódromo, señalando que las instalaciones del autódromo habían sido solicitadas para un "entrenamiento" de duatlón y no para una competencia como tal, aunque esta explicación no habría terminado de convencer a los inspectores municipales que igualmente llevaron adelante el procedimiento.