“Esa agua sale a 20 grados y cuando cae sobre la planta – con una temperatura ambiente de 0 grados o inferior – se congela”, detalló.
Estado
Pannunzio ilustró que “cuando el agua cambia de estado – del líquido al sólido- libera energía y eso pasa como calor a la planta”. Por lo que “hay un flujo continuo que pasa hacia la planta”.“Cuando se vea hielo bien cristalino, quiere decir que es compacto y puede trasmitir esas calorías; a diferencia de una escarcha, que tiene muchos espacios con aire adentro y no permite ese fenómeno”, puntualizó el presidente de APAMA.
“El hielo cristalino protege la planta”, sintetizó.
Inversión térmica
El riego permite que se formen esas postales y “por eso seguimos regando, para que cuando se produzca el fenómeno de inversión térmica – porque desde el amanecer, la atmósfera empieza a calentarse – ese hielo vuelva a la fase líquida y la planta se libera”, contó Pannunzio.Por eso, mencionó, durante esta semana de extremos fríos, “esos equipos anti helada funcionaron hasta las 12:30 o hasta las 13 horas, porque no se iba al hielo”.
El sistema permite una “protección sobre las flores, que quedan con pétalos blancos en lugar de verse necrosados”, remató.