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Concejal Felipe Sastre, Juntos por Entre Ríos
El concejal Felipe Sastre -Juntos por Entre Ríos- comentó que “si bien la redacción original -de la reforma tributaria- era un poquito más ambiciosa", pero según explicó, "en el mismo momento que la anunciábamos, se conoció la decisión del gobierno nacional de quitar el cobro de tasas de la factura de electricidad”, lo que “obligó a hacer por etapas la reforma que nosotros esperábamos en este punto y hacer un cálculo preliminar de acá a fines de diciembre, con la configuración que finalmente se terminó votando este jueves para el artículo 56”.
Dicho esto, consideró que “se abrió una ventana para poder evaluar cómo es más conveniente cobrar la tasa de alumbrado en lo sucesivo, para adaptarse también a la normativa nacional”.

En otras palabras, apuntó que “lo que va a regir para el próximo mes, que si se quiere podríamos decir es como una prueba piloto, va a beneficiar al universo de comercios, kioscos, restaurantes, bares, pizzerías que tienen heladeras y que, encontrándose dentro de la T1 general, hoy pagan muchísimo de alumbrado”, por lo que “se va a aplicar el tope de 350 kW y todo lo que lo exceda no va a pagar tasa de alumbrado”.
Última sesión ordinaria
Por otro lado, aclaró que “la reforma tributaria es para el 2024” y anticipó que “dentro de 15 días, en la última sesión ordinaria, vamos a votar la tributaria 2025, que va a regir durante todo el año que viene, aplicando desde luego el criterio de la reforma tributaria, reiterando todo lo que se ha reducido o eliminado, mientras que en la tasa de alumbrado en particular, tenemos el compromiso de seguir evaluando su impacto, pero queremos tener algún cálculo preliminar, sobre todo para no desfasarnos con la resolución del gobierno nacional”.
Alumbrado para usuarios residenciales
Sin embargo, remarcó que “un consumo domiciliario no suele superar los 300 kW, entonces, aún si nosotros lo hubiéramos hecho extensivo normativamente a los usuarios residenciales, en realidad hubiera sido una mera formalidad, porque no hay consumos que superen esos topes”, por lo que “al usuario residencial en realidad habría que darle una solución que esté por debajo de los 350 kW”.
Arcas municipales
Por otro lado, el concejal fue consultado sobre la pérdida de recaudación que supone no cobrar este tipo de tasas, sobre lo que recordó que “por el cálculo estimativo original, se hablaba de que la Municipalidad perdería alrededor de 500 millones de pesos”.

En esta oportunidad, manifestó que “con el artículo reformado no tengo acceso al cálculo de cuánto estaría impactando, pero creo que será objeto de análisis intensivo el próximo mes”.

Aún así, valoró “todo lo que hemos avanzado en materia de reducción y eliminación de tasas y aranceles, que son 300 en total prácticamente, es dinero que no va a ingresar a las arcas y que se va a ahorrar a través de la reducción del gasto público”, ya que “se han eliminado cajas chicas, contratos, vales de combustible, se han optimizado gastos y las licitaciones son absolutamente transparentes”.