"Con el mercado de China se abre la posibilidad de hacer una campaña entera mostrando nuestra fruta”, explicó Alejandro Pannunzio, presidente de la Asociación de Productores de Arándanos de la Mesopotamia Argentina (APAMA) y vicepresidente del Comité Argentino de Arándanos (Abc).
El dirigente adelantó que “va a ser muy difícil por la tremenda carga impositiva que tenemos, como las retenciones, la baja de reintegros, el impuesto a los ingresos brutos que impacta en toda la cadena”. A eso, se suman “los impuestos provinciales y municipales que impactan en la tarifa de energía eléctrica y la no disponibilidad inmediata del IVA para compensar de manera inmediata para el pago de otros impuestos”, enumeró.
Competencia y producción
Para Pannunzio, tal situación “impacta en la competitividad que nos falta y que nos genera incertidumbre para saber si vamos a poder aprovechar los beneficios de los mercados que se abrieron”.En cuanto a la producción estimada para este año, el productor adelantó que la cantidad de hectáreas es similar a la campaña anterior, "con la expectativa de poder lograr cosechar toda la producción que se vislumbra importante".
Nuevos mercados
La apertura de China y Tailandia fueron hitos que el sector capitalizó en el último año. Sobre los avances en este sentido, Pannunzio adelantó que el sector espera alcanzar acuerdos de libre comercio para competir en igualdad de condiciones con los países que como Chile y Perú, si los tienen.A su vez, destacó que el mercado interno “se sigue desarrollando”, y es 2muy importante para nuestra actividad contar con ese crecimiento, no solamente para ubicar una buena parte de nuestra fruta, sino también por los enormes beneficios para la salud que genera el consumo de arándanos”, indicó.
Afortunadamente “muchos lo prefieren por su sabor, muchos por sus propiedades nutraceuticas y básicamente a todos los niños les encanta", remató el productor.