Si bien ya existen escuelas secundarias técnicas la característica diferencial que tendría esta es que dependería de la universidad aprovechando su infraestructura y sus recursos humanos y el nivel de enseñanza que sólo puede ofrecer una universidad.
Cabe destacar que la apertura de establecimientos de enseñanza secundaria se encuentra contemplada en el Estatuto de la Universidad Nacional de Entre Ríos (Res. C.S. 113/05), que establece como una de sus finalidades “propender a la coordinación de los tres (3) ciclos de enseñanza –primaria, media y superior- en la unidad del proceso educativo, tendiendo a la obtención de una gradación lógica del conocimiento en cuanto a contenido, complejidad y profundidad” (Artículo 2 Inciso f)). Asimismo, estas atribuciones por parte de las universidades nacionales se expresan en el artículo 29 Inciso g) de la Ley de Educación Superior N° 24.521. De hecho hay varias experiencias en las Universidades Nacionales respecto a la creación de Escuelas preuniversitarias en general y secundarias en particular, siendo la de la Facultad de Ciencias de la Alimentación la primera en la región.
Inicialmente, se utilizarían las instalaciones con que cuenta la Facultad como sede de la escuela, mientras se gestiona la construcción de un espacio específico o la adecuación de alguno ya existente que responda a las características de la educación secundaria en términos pedagógicos y organizativos. Actualmente la Facultad cuenta con los siguientes servicios para los estudiantes: comedor, bibliotecas, laboratorios, salas de informática y un gimnasio con 1200 mts2 para actividades deportivas y recreativas.
En cuanto al ingreso, sostiene el mismo criterio irrestricto de la formación de grado de la UNER. Ante la eventual sobredemanda al momento del ingreso y con base en la experiencia de otras universidades nacionales, se considera un dispositivo de sorteo entre los inscriptos.
Dentro de los beneficios que se consideran se señala que “la creación de una escuela secundaria técnica aportará a la formación de técnicos requeridos para el desarrollo de la región, a la vez que estimulará la continuación de estudios de carrera de las ciencias experimentales”. Además “la inclusión educativa brindará las condiciones necesarias que posibiliten mejoras en la calidad de vida de su comunidad, especialmente de los estudiantes provenientes de sectores socialmente vulnerables”.