El resultado es un libro que no tiene nada de neutral, compuesto por fotografías en blanco y negro, que despliegan por detrás de los enfoques de retratos, encuentros, momentos íntimos y multitudinarios, una serie de tramas más sutiles, la progresiva ocupación del espacio público por las mujeres en encuentro, la lucha entablada entre lo dicho y lo arrancado de las paredes, la desobediencia y diversidad marcada en los rostros, un clima de aquelarre festivo de sabiduría recuperada y puesta en acto. La mezcla de visión personal y testimonio, de denuncia y humor, avanzan sobre una hipótesis que las fotógrafas desarrollan en la entrevista adjunta: la posibilidad de pensar una fotografía y una mirada fotográfica anti yuta.
El resultado es un libro que no tiene nada de neutral, compuesto por fotografías en blanco y negro, que despliegan por detrás de los enfoques de retratos, encuentros, momentos íntimos y multitudinarios, una serie de tramas más sutiles, la progresiva ocupación del espacio público por las mujeres en encuentro, la lucha entablada entre lo dicho y lo arrancado de las paredes, la desobediencia y diversidad marcada en los rostros, un clima de aquelarre festivo de sabiduría recuperada y puesta en acto. La mezcla de visión personal y testimonio, de denuncia y humor, avanzan sobre una hipótesis que las fotógrafas desarrollan en la entrevista adjunta: la posibilidad de pensar una fotografía y una mirada fotográfica anti yuta.