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En declaraciones realizadas al programa A Quien Corresponda (Radio De la Plaza), Garcilazo explicitó que “para analizar la situación epidemiológica hay que seguir la curva epidémica que es el número de casos que van ocurriendo de acuerdo a la fecha en que las personas manifiestan los síntomas” y en tal sentido sostuvo que “hace ya tres semanas seguidas se veía un descenso en el número de casos en relación a lo que fue el 23 de mayo que fue el pico mas alto que hubo en esta segunda ola, que tuvo predominantemente de variantes de preocupación Alfa y Gama; luego hubo un descenso de la cantidad de casos y hoy se ve una estabilización en esta última semana donde los casos se frenaron pero en un promedio bastante alto todavía”.

“Veníamos con un descenso bastante importante desde mayo y ahora estamos en la misma situación en que estábamos en abril, con un promedio de entre 500 y 600 casos diarios en la provincia lo que sigue siendo alto. Hubo un pequeño repunte en Paraná durante algunos días y hay que ver qué pasa en las próximas semanas”, agregó.

Respecto de la situación de Gualeguaychú, el funcionario indicó que “se nota que en la comparación de 14 días previos, en la mayoría de las localidades más grandes como Paraná y Concordia bajaron los números de casos pero Gualeguaychú seguía en una instancia bastante alta del número de casos altos. De hecho hoy es uno de los Departamento con tasa más alta, y como localidad es la que más casos aporta, y es una de las localidades en que todavía no se notó ese descenso que se vio en la mayoría de los otros Departamentos”.

Consultado por la preocupación existente ante el actual nivel de movilidad y la proximidad de las vacaciones invernales, admitió: “Hemos aprendido que el coronavirus se mueve en relación con la circulación de la gente y está claro que en la medida en que la gente empieza a circular y a bajar las acciones para cuidarse y para evitar estar en lugares cerrados con mucha gente, se genera un aumento de casos. Por lo tanto, todo lo que sea mayor circulación aumenta los casos, y hoy seguimos en una situación de alto riesgo epidemiológico”.

Al respecto, alertó que “si bien parece que nos hemos acostumbrado a ver los indicadores en rojo, eso no debe hacerse costumbre. Necesitamos que los números estén muy por debajo de lo que están hoy en cuanto al nivel de contagios y de transmisibilidad. Esto nos preocupa porque estamos en un nivel alto de contagios y agregarle a eso más circulación, obviamente que va a llevar a más contagios. La vacuna ayuda pero sola no puede controlar la circulación viral y que haya más contagios y más circulación viral puede perjudicar a la campaña de vacunación, por eso hay que tener claro que hay que bajar el número de contagios y aumentar el porcentaje de personas vacunadas”.

Sobre la afectación de la vacunación, Garcilazo explicó que “si se mantienen altos niveles de contagios, en algún momento va a surgir alguna variante que puede hacer, como ya sucede en el mundo, que comience a disminuir la efectividad de las vacunas. Si tenemos bajo número de casos la efectividad de las vacunas se va a sostener y serán mucho mejores las campañas de vacunación en todo el mundo, pero si sigue habiendo altos niveles de contagios el virus va ir evolucionando y en esa evolución va a ir evadiendo la inmunidad que puedan tener las vacunas y su efectividad será mejor”.

“Por eso hay que tener claro que son las dos cosas al mismo tiempo las que hacen que se pueda controlar la pandemia, no hay que acostumbrarse a tener un número tan alto de casos y de fallecidos. Este es el punto clave a tener en cuenta”, sentenció.

Consultado por la preocupación ante la variante Delta y la situación de los viajeros que llegan desde el exterior, el profesional informó que “en la provincia, las personas que vienen del exterior en forma obligatoria tienen que tener una PCR negativa al ingreso del país, un test de antígenos en Ezeiza a quienes llegan por vía aérea y una vez terminada la cuarentena en cada lugar deben hacer otra PCR para obtener el alta de la cuarentena”.

Agregó que “en la provincia de las PCR realizadas no hemos tenido ningún caso confirmado todavía, pero seguramente irán a aparecen” y refirió que “la mayoría de la gente que vuelve del exterior a nuestra provincia generalmente son de países limítrofes, no son de países que hoy están con circulación comunitaria de la variante Delta; lo más probable es que se dará primero en el AMBA porque allí sí hay mucho arribo de personas que vienen de Inglaterra, India, Estdos Unidos y algunos otros países de Europa. Lo más probable es que primero se vea la aparición de casos en AMBA y luego se vaya diseminado”.

“Por el momento en la provincia no hemos tenido confirmación de personas que hayan llegado de estos países que dieran positivo, sí se hicieron PCR negativas y obviamente todavía no hay ninguna secuenciación gnómica que haya dado positivo para esta variante”, aseguró.

Finalmente, en cuanto a las expectativas de una mejora de la situación epidemiológica cuando llegue el verano, dijo que “condiciones favorables habrá cuando salgamos del invierno pero el virus no se va a ir por esa situación. En invierno tenemos actividades como personas que hacen que los contagios sean más fáciles porque estamos más encerrados, lo que favorece el contagio, pero eso no quiere decir que en verano no haya contagios y de hecho uno de los picos más altos, previo a la segunda ola, fue en enero y estuvo relacionado a la circulación que hubo por las fiestas”.

“Por lo tanto, se sigue plantando lo mismo, si bien en meses de verano al haber más temperatura y actividades al aire libre, lo que hace también que las vías respiratorias estén mejor y con más defensas, esto hace que en general los virus respiratorios caigan en su transmisibilidad pero eso no quiere decir que no pueda haber un pico de contagios durante el verano si hay mucha movilidad de gente”, concluyó.