Unos minutos antes de las 19, Marcelo Agüero ingresó finalmente al último tramo, las dos cuadras que los separaban de los Patronos de Salta, estuvieron cargadas de mucha emoción. Finalmente, en la tarde del sábado el peregrino entró a la Catedral de la ciudad de Salta y se desplomó a los pies del Señor y la Virgen del Milagro.
A su paso, el caminante recibió el saludo de amigos, conocidos y de aquellos que siguieron su historia, en estas últimas semanas.
A lo largo de estas semanas, Marcelo Agüero pasó por un serie de localidades, donde los vecinos se sumaron a su fe y lo asistieron. A su paso por la localidad de Taco Pozo, el hombre tuvo que ser asistido por un par de ampollas en los pies. En Joaquín V. González, también fue bienvenido, lo mismo que en El Galpón.
En la localidad de General Güemes, Agüero fue recibido por el intendente de este municipio, Kety Rosso, donde descansó, y se preparó para el último tramo.
A las 16 del sábado 7 de septiembre, Marcelo había llegado al ex peaje de Aunor, a unos pocos kilómetros de su destino final: la Catedral.
Pedidos y agradecimientos
En su encuentro con El Tribuno, Marcelo Agüero, agradeció a los amigos que lo acompañaron y a los creyentes, que a lo largo de su camino, fueron dejando en sus manos los pedidos para el Señor y la Virgen del Milagro.Cientos de ellos, imposibilitados de poder llegar hasta la ciudad de Salta, para ser partícipes de la fiesta del Milagro y de la procesión que se concretará el próximo 15 de septiembre, este caminante salteño que llegó desde Concordia, fue el mensajero que intercedió por la fe para cruzar el camino.