Las pautas buscan que quienes están obligados a quedarse en casa sobrelleven de la mejor manera la situación que implica no poder salir. “Lo que aconsejamos es organizar una rutina a partir de la cual uno pueda seguir realizando actividades, como por ejemplo cada media hora hacer algún ejercicio con los brazos, piernas y rodillas; caminar dentro de la casa, moverse; cosas que podemos hacer de manera sencilla, parados o sentados”, sugirió el especialista. “Por otro lado necesitamos comunicarnos y -aun cuando la comunicación personal está limitada- podemos hablar mucho por teléfono, usar Facebook, whatsapp. Estar comunicados genera el compromiso con el otro”, explicó Iacub.
La otra estrategia es hacer una hora de alguna actividad intelectual como crucigramas, jugar a las cartas, leer. “Poder ejercitar la mente para que no nos paralice lo que está pasando, porque también lo que necesitamos es bajar las revoluciones y dejar de escuchar noticias cuando sentimos que nos están haciendo mal”, dijo el especialista.
Entre las recomendaciones, los especialistas hacen hincapié en la necesidad de mantener los hábitos alimenticios, tanto en sus horarios como en su calidad. “Hay que darle mucha importancia a estos momentos”.
Para Iacub, “a pesar de que la situación puede ser difícil, la risa siempre puede ser un excelente motor para sacar tensiones: tenemos que convocarla. Hay un tiempo para preocuparse pero también hay un tiempo para aflojar, darse un respiro y pensar en cosas lindas; y si la persona mayor necesita ayuda, tiene que pedirla. En esta situación es fundamental, el compromiso de todos”.