Los efectivos de la fuerza comenzaron una investigación que derivó en un allanamiento de una vivienda ubicada en calle Islas Malvinas de esa localidad, donde se procedió de decomiso de cortes cárnicos vacunos por un total de cinco kilogramos, los cuales presentaban pelos de color negro los que serían coincidentes con el pelaje del bovino faenado, como también pasto, tierra y materia orgánica, vestigios típicos de una faena clandestina.
Mientras que en dicho procedimiento se logró secuestrar también dos cuchillos y una bolsa tipo mochila de tela.
Por otra parte, el personal policial procedió a desnaturalización de la carne comisada por acción del fuego, ya que no era apta para consumo humano, según el examen realizado por el médico veterinario interviniente en el procedimiento.