“Se trató de un hecho fortuito y totalmente accidental”, comenzó señalando el oficial de la Policía de Entre Ríos.
El escenario del hecho fue un domicilio de la zona noroeste de Concordia, vivienda familiar de este chico de 7 años, quien “aparentemente tomó un petardo que encontró en la calle, según refirieron los padres, ingresó a la casa, buscó un encendedor y lo hizo explotar”. La falta de conocimiento para manipular este tipo de elemento peligroso llevó a que el nene no lo arrojara a tiempo y el petardo le explotó en la mano, provocándole gravísimas lesiones y quemaduras.

Parodi dijo que la pirotecnia “quizás pueda haber quedado tirado después de los festejos del campeonato de Argentina, sin explotar o sin encender”, por lo que “la enseñanza que nos trae esto es que tenemos que tener mucho recaudo con estos elementos para estas fiestas”, más allá que en Concordia “está prohibida la venta”, ya que “es muy peligroso, especialmente para los chicos y los animales”.