Cabe recordar que tras el hallazgo del cuerpo de la beba, la investigación devino en la detención de la pareja en un domicilio de Concordia, hasta dónde se habrían trasladado luego de abandonar la habitación que habían alquilado por un día en Chajarí.
Una de las primeras pruebas relevadas en la investigación surgió de la autopsia practicada al cuerpo de la beba, quien habría pesado 2,600 kg aproximadamente. La misma determinó que falleció por un contundente golpe recibido en la cabeza.
En el domicilio allanado en Chajarí y donde estuvieron los imputados la noche anterior al hallazgo del cuerpo, se encontraron elementos -vestigios de sangre, entre otros elementos que contribuyeron al esclarecimiento del hecho.
Además, tras la detención de los implicados, se ordenó la evaluación médica para la mujer, comprobándose que había parido recientemente.
Otro dato y que tiene certificación médica, indica que la beba de 39 a 40 semanas de gestación, según la autopsia habría respirado un tiempo antes de su muerte.
El último elemento contundente de la investigación fue el ADN que dio resultado positivo.