El rodado era conducido por un hombre mayor de edad, oriundo de Santa Elena quien transportaba una importante cantidad de salames y otros embutidos sin rótulos de habilitación y en clara falta a la Ley de Carnes 7.292.
De inmediato se procedió al secuestro de la mercadería y a la investigación del conductor, de quien se pudo saber que tiene una carnicería en Santa Elena sin habilitación para fabricar embutidos y pretendía comercializarlos en la localidad de San José de Feliciano.