El rodado circulaba de sur a norte y era conducido por un hombre, mayor de edad, oriundo de la provincia de Santa Fe; quien al exhibir la cédula de identificación del vehículo manifiesto al personal policial que compró el vehículo pero no lo transfirió.
De inmediato, los efectivos de la fuerza comprueban que los stickers de seguridad de la carrocería, coincidiendo con la documental, pero el número grabado en la mesada del motor no coincide.
Se procedió a consultar por el Sistema Federal de Comunicaciones Federales (Sipcof) y DRNPA, no arrojando pedido alguno y no encontrándose inscripto en la Dirección de Registro Nacional de Propiedad del Automotor.
Por este motivo se da intervención a la Fiscalía Chajarí y concreta el secuestro del rodado, intimándose al dueño actual a que regularice la situación de inscripción del motor.