Allí un automóvil marca Chevrolet modelo Sony, que se conducía a alta velocidad, perdió el control y terminó impactando contra una palmera del cantero central de una avenida.
El rodado sufrió visibles daños de consideración en la parte delantera y quedó atravesado en plena avenida de la ciudad termal.
Al mando del vehículo se conducía un joven de 20 años, quien estaba acompañado de otro de 21 años; ambos resultaron ilesos.
Se dio intervención al personal de inspección municipal, quien tras realizar el test de alcoholemia, constató que el conductor tenía 1.14 grados de alcohol en sangre, por lo que se procedió al secuestro del automóvil.