En lo que respecta estrictamente a Entre Ríos, Reniero enumeró que “los reclamos, en su mayoría son siempre los mismos, caminos rurales, impuestos, retenciones, impuestos que se pagan”. Allí solicitó “una reforma tributaria urgente y la reducción en el gasto público”.
También reiteró los planteos por “un cierre de exportaciones de carnes que no se consume en nuestro país, que nos ha hecho perder millones de dólares por un capricho ideológico al sector”.
En un momento de su alocución afirmó que “conversamos con cualquier gobierno, no representamos a un partido político”, pero advirtió que desde el sector agropecuario “buscamos que no se pierda la república”, porque “somos defensores de la democracia” y “queremos que el gobierno corrija este rumbo que nos lleva al abismo”. A lo que agregó que “la gente del campo es tranquila, trabajadora y de palabra, no como el gobierno que nos vive mintiendo, son unos mentirosos”, aseveró.
Asimismo, puso la lupa en los “chicos en edad escolar que aún no aprendieron a leer y escribir”, afirmando que “este es el país a donde nos quieren llevar, cuanto más analfabetos tengan es mejor para ellos”.
En ese ir y venir temático, también mencionó que “han puesto cepo a todo y el único mercado libre es el de la delincuencia, traicionaron sus promesas de campaña, nunca presentaron un plan de gobierno y que nos vengan ahora con recetas mágicas… el pueblo dejó de ser tonto. Esto es un maquillaje al mejor estilo de Hollywood, son siempre los mismos, y pasan de un cargo a otro; ahora reparten electrodomésticos, viajes o estadías, cualquier cosa prometen con tal de conseguir votos”.
Fue allí, casi al final de su discurso donde subrayó que “gracias a dios el país se despertó en las PASO y esperemos que no se ponga a dormir la siesta en Noviembre”, cerrando su alocución arengando con un “Vamos Argentina, vamos que se puede”.