Agrandar imagen Jorge Majluf, director de la consultora Mercado
Jorge Majluf, director de la consultora Mercado
Al respecto, Majluff precisó que en el actual escenario “hay cierta paridad entre las principales fuerzas políticas que van a competir (Frente de Todos y Juntos por el Cambio)”.

No obstante, reconoció que “hay que tener ciertas precauciones en cuanto a las lecturas de los cuadros de intención de voto que puede haber en las encuestas provinciales, porque los dirigentes, particularmente del Frente de Todos, aún no están posicionados de una manera importante y tienen un nivel de conocimiento bajo”.

Es debido a esto que “los escenarios son un poco irreales” y, “para subsanar esa cuestión, uno puede preguntar si votaría a Frigerio o a la continuidad de Bordet, una respuesta que da paridad, también con desventaja de Frigerio, pero paridad al fin”.

Sin embargo, también “hay que preguntarse si el que será candidato será visto realmente como la continuidad de Bordet o si puede llegar a tener cuerpo propio, construir votos propios que le sumen a esa continuidad”.
Elecciones legislativas y ejecutivas
Por otro lado, Majluff reconoció que “siempre me pareció equivocado comparar una elección legislativa con una elección ejecutiva”, consultado sobre los motivos que habrían impulsado la modificación de un potencial resultado eleccionario.

“En la elección legislativa, más allá de los esfuerzos que se hagan a nivel estrategia, no termina siendo más que un plebiscito del gobierno nacional”, explicó. Debido a esto, consideró que “en el 2021 se votó por Alberto sí o Alberto no y, claramente, ganó el Alberto no; en el 2017 se votó por Macri sí o Macri no, ganó el Macri sí y recuerdo que la gente, en aquel entonces, decía que las cosas no iban bien, pero había que darle más tiempo” al entonces gobierno de CAMBIEMOS.

Por el contrario, en “una elección ejecutiva, como la que vamos a tener ahora, la gente vota con otro eje”, ya que “en lo nacional vota por cómo va la economía, por la continuidad o el cambio del gobierno nacional en relación a la percepción del éxito o los logros de las gestiones nacionales".

Mientras que "en una elección para intendente, vota por la continuidad o el cambio del intendente y de su línea, en base a si están contentos o no con la gestión”.

De esta manera, puntualizó que “hay muchísimos casos en donde, en una elección legislativa de una ciudad determinada, el intendente está muy mal visto por su mala gestión y, sin embargo, gana en esa ciudad”.

A modo de ejemplo, puntualizó que “un intendente peronista en una ciudad determinada está mal visto y, en esa elección legislativa, el peronismo gana y no es porque la gente pensó en el intendente, sino porque pensó en el gobierno nacional”.

Así también, comentó que “he visto casos en los que el intendente está muy bien y ese palo político pierde la legislativa, porque, en estos casos, la participación que tiene en la construcción del voto el intendente o el gobernador, es prácticamente inexistente en las ciudades medianas o grandes”.
Presencia del liberalismo
Por último, sobre la imposición de Milei y el liberalismo en el ámbito presencial, Majluff consideró que “se presenta como una tercera fuerza y, por eso, no se podrá hablar de una elección polarizada en principio”.

Sin embargo, agregó que “consolidarse es una palabra que le queda un poco grande, porque hay tandas de mediciones que dan para decir que se consolida, pero después ves algún mes en el que los números suyos –de Milei– caen bastante”, por lo que “podemos decir que se está formando una consolidación y pareciera que va a tener sus dos cifras de intención de votos”, lo que “en mi opinión, le quita (votos) a Juntos por el Cambio”, concluyó el especialista.