De esta manera, precisó que “sobre eso nos reunimos con integrantes del ejecutivo, con el intendente y todos nos han manifestado la necesidad de trabajar sobre esa avenida por la cantidad de accidentes que hubo, pero también es una zona que está por desarrollar obras de gran impacto para la ciudad, como lo son puntualmente el aeropuerto, terminar el asfaltado de Vuelta de Obligado y reordenar el tránsito pesado para darle mayor utilidad a la avenida”.
Al respecto, reconoció que “hay buena voluntad” y “varias cosas de las que presentamos en el proyecto nos informaron que ya las tenían en carpeta como posible solución”, además “agregaron algunas cosas, algunas se quitaron, pero por lo menos hay voluntad de hacerlo”, ya que “es compartida la necesidad de intervenir por estos motivos y por el desarrollo de una arteria que será parte de un corredor turístico”.
Además “presentamos varias alternativas de velocidades diferentes según la zona de Rosch que transites, pero también se habló sobre tener una única velocidad máxima por una cuestión de organización”, precisó.
Finalmente, recordó que “nosotros propusimos una serie de cosas, alternativas orientadas a una intervención que pueda hacerse sin dañar la cinta asfáltica y que no tenga un gran impacto presupuestario”, sobre las que “surgieron algunas cosas de difícil cumplimiento en una primera etapa del proyecto”, pero “se agregaron algunas otras cuestiones más, como lo son sistemas electrónico para medir la velocidad y tener una regularidad” sobre la cuestión.