“El Manco es un degenerado porque en calle Pellegrini, donde vivía, tenía un prostíbulo; llevaba a prostituir chicas”, denunció Margarita Peñalver del Colectivo de Mujeres con vos y voz.
La mujer apuntó otra el defensor de Pobres y Menores en Federación, Juan José Giorgio, a quien acusó de “haber defendido a la madre de la niña abusada”.
“La docente de la escuela a que asistía la niña, cuando tenía seis años, la llevó golpeada y con marcas que parecían de un abuso sexual, toda chuponeada”, rememoró. Y según sintetizó, la pequeña fue trasladada desde el Centro Integral de Asistencia Familiar (CIAF) a una comunidad socioeducativa, durante un par de meses, pero que -por disposición judicial- debía mantener el vínculo con la madre.
“Giorgio nunca escuchó a los vecinos que nos cansamos de denunciar la prostitución que se ejercía en la casa de Josefina, que la niña era víctima y testigo de situaciones de pornografía”, acusó Peñalver al reprochar que “nunca se había constatado que la madre no le brindara la contención que necesitaba”.