Agrandar imagen El ataque ocurrió durante la tarde de este miércoles.
El ataque ocurrió durante la tarde de este miércoles.
Leonardo, dueño de la cooperativa recicladora atacada, hizo la correspondiente denuncia en sede policial, ya que recibió amenazas concretas "de que nos van a robar, que nos van a matar y que nos van a prender fuego".
El hecho
Tal y como lo expresó el damnificado en su denuncia, a la que pudo acceder Diario Río Uruguay, manifestó que adquirió esa planta de reciclado hace aproximadamente y desde que comenzaron a trabajar en el terreno, "se vieron pedazos de latas y otros metales que estaban enterrados", lo que motivó a "diferentes personas no deseadas a meterse en el terreno con intenciones de sacar o sustraer dichos metales".

Además, destacó que -aún- "alrededor del predio no existe ninguna medida que impida el ingreso de personas externas", a las que solo "les cuesta escalar una altura propia del terreno, que no es dificultoso".

La situación se agravó este miércoles, alrededor de las 16:15, cuando cuatro jóvenes se hicieron presentes mientras los trabajadores estaban en el predio. Según explicó Leonardo, al notar su presencia "les dijeron que se vayan de la propiedad", pero estas personas "contestaron que no se iban a ir" y les expresaron que "no les iban a decir dónde tenían que estar", por lo que siguieron con su voluntad de juntar la chatarra.

Fue entonces que, al enterarse de la situación, Leonardo llegó al lugar y "los corrí", pero "dos de ellos se quedaron y se negaron a marcharse", por lo que "empujé a uno para que se fuera". A raíz de esto, uno de los jóvenes "tomó un palo de un metro de largo" y comenzó a golpearlo en diferentes partes del cuerpo, ocasionándole lesiones.
Tras el ataque, el encargado del predio intentó "salir corriendo", mientras los malhechores le arrojaban piedras y lo amenazaban a los gritos. Momentos más tarde, uno de los atacantes "escapó hacia las vías del tren", pero luego volvió al predio "con un arma de fuego y disparó en dos oportunidades desde unos 60 metros", afortunadamente sin impactar en la humanidad de ninguno de los trabajadores.
Finalmente, según relató el denunciante, otro de los jóvenes "regresó al lugar acompañado por su padres y ambos comenzaron a insultar y a amenazar a uno de los empleados", manifestando que "los iban a matar y les iban a robar todo". De igual manera, la pareja se presentó en la casa de los trabajadores y reiteraron las amenazas.