Una vez dentro de la misma, se dio vuelta y observó el triste cuadro del auto envuelto en llamas. A pesar de los esfuerzos del padre y empleados del lugar, nada pudieron hacer para salvar la vida de los pequeños que murieron carbonizados en la parte trasera del Peugeot.
Más tarde, llegó la madre al lugar quien debió ser contenida por su marido y demás personas que estaban junto a ellos. El matrimonio, que serían de Basavilbaso, y los desafortunados menores vivían en Aldea San Juan.
Tomó intervención Bomberos Voluntarios Urdinarrain y personal policial a cargo del Comisario Luis Benítez. Además de personal de Criminalística de Gualeguaychú.
Fuente: El Once