Con la presencia de 15 stands, diseñadores y emprendedores locales ofrecieron sus productos. Entre los que se destacaron: cuadros, espejos tallados, cajas de madera intervenidas con decoupage, accesorios de moda, indumentaria y prendas confeccionadas de manera artesanal.
Esta edición de la feria, enmarcada en el ciclo Viví Costanera todo el año, tuvo como novedad la instalación de un espacio exclusivo dedicado al té. Allí, una empresa local dedicada al rubro, ofreció infusiones con diversos acompañamientos, como tortas artesanales, productos salados y hasta cupcakes.