Al enterarse de la acción los familiares de la víctima se hicieron presente y le pegaron una golpiza que debió ser hospitalizado para recibir las correspondientes curaciones.
Pero el agresor, no conforme con todo ello se embriagó y volvió a crear conflictos, por lo que debieron actual los efectivos de la fuerza, quienes lo detuvieron y lo trasladaron de inmediato a la dependencia policial.